CIC nanoGUNE mostrará en Basque Industry 4.0 sus últimas tecnologías en impresión 3D y sistemas de detección

Organizado por el departamento de Desarrollo Económico e Infraestructuras del Gobierno Vasco, a través del Grupo SPRI, el BEC de Barakaldo acogerá mañana y pasado, 20 y 21 de noviembre, la 6ª edición del Basque Industry 4.0. Representantes de empresas vascas, entre ellas el centro de investigación CIC nanoGUNE, se reunirán para asistir a ponencias, demostraciones y talleres sobre todas las tecnologías que conformarán el futuro y la investigación en la cuarta revolución industrial.

“La nanociencia y la nanotecnología son los grandes artífices de las auténticas transformaciones y están, y estarán, presentes en toda la cadena de valor de la industria. Por eso estar en la cresta de la ola en este ámbito es importante si queremos que nuestra industria sea competitiva en el futuro”, señala Ainara Garcia Gallastegui, responsable de Transferencia de Tecnología de nanoGUNE.

NanoGUNE, que compartirá stand con otros miembros de la alianza Basque Research and Technology Alliance (BRTA), exhibirá en este evento sus últimas tecnologías en impresión 3D y sistemas de detección. Por un lado, expondrá una innovadora tecnología recientemente protegida mediante solicitud de patente. Se trata de NovaSpider, un equipo de impresión 3D que es capaz de crear materiales compuestos por capas de membranas no tejidas de nanofibras orientadas aleatoriamente y de microfibras con orientación controlada con precisión.

Los campos de aplicación de las estructuras generadas por NovaSpider son variados y prometedores. El equipo permite diseñar materiales compuestos robustos, ligeros, porosos y con alta superficie específica a partir de nanofibras poliméricas cuya naturaleza, diámetro, aspecto y morfología puede modularse de forma sencilla y eficiente. Este tipo de estructuras despiertan gran interés en campos como la medicina regenerativa, donde se utilizan como andamiaje para la regeneración de tejidos, el sector biomédico, donde son funcionalizados y empleados en liberación controlada de fármacos y protección de heridas, y el sector de la energía, donde se estudia su papel como catalizador en supercondensadores.

A su vez, cabe destacar su aplicación en el sector textil, y de empaquetado, dónde se busca mejorar la conservación de alimentos y la sustitución de materiales plásticos por materiales biodegradables. El banco de muestras probadas hasta ahora es amplio; azúcares, proteínas, colágeno, gelatina, celulosa, etc. demostrando la alta versatilidad de la tecnología. Estos materiales, depositados sobre el cartón de empaquetado, ofrecen las propiedades barrera que el cartón necesita para su contacto con los alimentos. De esta forma, se pretende suplir la función que hasta ahora ofrecía el film plástico y sustituirlo por un recubrimiento completamente biodegradable.

El proyecto es fruto del trabajo realizado durante los últimos años por el Dr. Wiwat Nuansing, experto en electrospinning, y el ingeniero Javier Latasa, especializado en mecatrónica en el Grupo de Auto-Ensamblado liderado por Alexander Bittner, Investigador Ikerbasque en nanoGUNE. El apoyo de expertos de la industria de la impresión 3D ha posibilitado que el equipo cumpla con los más altos estándares e incluya los últimos avances tecnológicos del sector.

Por otro lado, una de las especializaciones de nanoGUNE son los sistemas de detección y monitorización. Muestra de ello es la contribución del Grupo de Nanoingeniería liderado por Andreas Seifert, Profesor de Investigación Ikerbasque, a la detección temprana del Alzheimer. La combinación de tecnologías fotónicas con el análisis multivariante que se desarrolla en nanoGUNE junto con los últimos avances en machine deep learning (aprendizaje automático) del grupo Computer Vision en Tecnalia dentro del marco de colaboración Elkartek (Gobierno Vasco) son un ejemplo claro de lo que se conoce como Industry 4.0. Actualmente los desarrollos se están enfocando a aplicaciones en el sector de biosalud como por ejemplo a la monitorización de parámetros fisiológicos, y en particular a dolencias provocadas por la falta de oxígeno, o a la tan necesitada detección temprana de Alzheimer. La investigación también abarca el sector industrial dónde los estudios se centran en el control de calidad de alimentos incluyendo la presencia de microplásticos, basados en la combinación de sistemas sensoriales y de detección y algoritmos matemáticos de aprendizaje.