La Diputación Foral de Gipuzkoa, tras un proceso participativo llevado a cabo en colaboración con los agentes del ámbito de los Derechos Humanos y la Diversidad del territorio, ha presentado esta mañana el II Plan Foral de Diversidad, con el objetivo de garantizar la igualdad de derechos y la no discriminación en el territorio, de forma que todas las personas tengan, en su diversidad, las “mismas oportunidades para el desarrollo pleno de sus vidas”. Así lo ha manifestado esta mañana en un acto en Tabakalera el diputado general, Markel Olano, durante la presentación de la planificación aprobada para el periodo 2022-2024.

“La diversidad nos enriquece y nos fortalece. En la sociedad del siglo XXI, ¿cómo debe responder Gipuzkoa a las personas y realidades diversas que tenemos entre nosotros? Fortaleciendo el carácter comunitario que nos caracteriza y profundizando en la convivencia, activando la capacidad y fuerza social que existe en la sociedad guipuzcoana. Sólo así conseguiremos garantizar la igualdad de derechos y la no discriminación en nuestro territorio; sólo así conseguiremos combatir las desigualdades sociales”, ha afirmado el diputado general, ante representantes de diversas agrupaciones sociales presentes en Kutxa Kultur Plaza.

Según ha añadido, para materializar esta idea no sólo es “deseable”, sino “imprescindible”, profundizar en la “gobernanza colaborativa a todos los niveles”. En su opinión, esa colaboración va a dar un “salto importante” en este ámbito en Gipuzkoa, gracias al plan presentado hoy. Precisamente, la nueva planificación supondrá la constitución de Aniztasunaren Sarea (Red de la Diversidad), como espacio de colaboración entre asociaciones y entidades representativas de las diversidades. Se organizará como un espacio de participación y escucha, en forma de foro abierto, con capacidad de asesoramiento, contraste y propuesta.

10 líneas estratégicas, 21 acciones concretas

Con el fin de profundizar en este objetivo, el II Plan Foral de Diversidad 2022-2024 – Igualdad de Derechos establece tres retos principales. En relación a estos principales desafíos, establece 10 líneas estratégicas y 21 acciones concretas. El primer reto es seguir activando a las personas y a la ciudadanía hacia la diversidad con el objetivo de construir también el modelo Gipuzkoa en este ámbito; el segundo es avanzar hacia una gobernanza colaborativa multinivel con la sociedad civil organizada y agentes de la diversidad; y el tercer reto, por último, es reforzar la coordinación entre las instituciones en el ámbito de la diversidad y de los Derechos Humanos.

El diputado general ha animado a las y los guipuzcoanos a mantener su compromiso con los Derechos Humanos y la no discriminación, así como a no bajar la guardia ante “los falseamientos y debates racistas, homófobos y machistas” que plantean algunas corrientes ideológicas presentes tanto en Europa como en el Estado. “Somos un territorio abierto y moderno, pero debemos seguir alerta para desactivar los discursos populistas que pretenden hacer desaparecer la convivencia, la cohesión y la solidaridad que caracterizan a nuestra sociedad. Sólo así conseguiremos que Gipuzkoa sea uno de los territorios con menos desigualdad social de Europa”, ha planteado.

Ion Gambra, director de Derechos Humanos y Cultura Democrática, ha destacado “la enorme importancia” de que la sociedad civil y organizada participe en la “construcción” de políticas públicas y planificaciones para promover la diversidad y la igualdad de derechos. “Queremos aunar diferentes visiones y sensibilidades, y por ello hemos querido incorporar el conocimiento y la experiencia acumulada en el tejido asociativo guipuzcoano”, ha comentado.

El 95% de las aportaciones al proceso participativo, incluido en el plan

El II Plan Foral de Diversidad se ha completado a través de un proceso de deliberación participativa desarrollado por la Dirección foral de Derechos Humanos y Cultura Democrática, entre abril y diciembre del año pasado. En esta dinámica han participado representantes de 53 entidades y asociaciones–nueve municipios, 32 asociaciones, cinco entidades públicas y siete instituciones–. Entre todos estos agentes, estuvieron representadas las diversidades existentes en el territorio: diversidad derivada de las migraciones, diversidad étnica, diversidad funcional y diversidad de orientación sexual e identidad de género.

Tras varias sesiones de trabajo y jornadas participativas, durante estos meses se han recibido 91 propuestas vinculadas al plan. De ellas, el 66% han sido recogidas íntegramente en la última versión (60 propuestas), el 29% se han plasmado de forma parcial (26) y, por tanto, el 95% de las propuestas ha tenido su reflejo en el II Plan Foral de Diversidad.

El I Plan Foral de Convivencia en Diversidad 2018-2020 estableció cuatro objetivos: promover la diversidad desde la perspectiva de los derechos y la no discriminación; promover la cohesión social, la no discriminación y la convivencia; contribuir a la organización y creación de espacios y acciones que permitan sinergias, y responder de forma coherente a todos los tipos de diversidad existentes en Gipuzkoa. Con esta premisa, desde 2017 hasta 2019, se impulsaron 132 proyectos de convivencia en diversidad, Derechos Humanos y educación para la transformación social, 14 estudios e investigación, seis proyectos de innovación social y diversas campañas de sensibilización y educación social, entre otros.