El Consejo de Diputados de la Diputación Foral aprobará mañana destinar 450.000 euros más para la Prestación Económica de Cuidados en el Entorno Familiar (PECE), a fin de que las personas menores de edad perciban una prestación económica superior a la de las personas adultas a partir del 1 de enero de 2018. Tras las reuniones que la diputada de Políticas Sociales, Maite Peña, ha mantenido con los progenitores de niños y niñas con necesidades especiales así como con las entidades que prestan atención a estos menores, y habiendo escuchado sus alegaciones, la Diputación Foral ha acordado aumentar las cuantías de las prestaciones económicas de las que en la actualidad se benefician 805 menores y ha fijado los siguientes importes:
Grado 1: 180 euros
Grado 2: 368 euros
Grado 3: 524 euros
“El motivo de esa diferenciación” –ha explicado Maite Peña- es que la mayoría de estas personas están atendidas en su propia familia por sus progenitores y que, a diferencia de las personas adultas beneficiarias de PECE, no es habitual la asistencia por parte de un asistente profesional”. Y ha añadido que la atención de estas personas menores en su domicilio “conlleva una serie de gastos extraordinarios” derivados de su dependencia y, en la mayoría de los casos esta prestación supone “una ayuda importante para las familias”.
Así, con los incrementos aprobados se destinarán 3.280.000 euros anuales a estos menores dependientes, y aun cuando sólo suponen un 5% del total de las personas dependientes beneficiarias de prestaciones económicas, la Diputación Foral de Gipuzkoa ha considerado que “se trata de un colectivo con especiales necesidades de atención y de protección”, ha subrayado la diputada.